<a href="http://ekosnegocios.com/negocios/verArticuloContenido.aspx?idArt=7150" target="_self" style="outline: none; font-family: helvetica neue, helvetica; font-size: 12px; text-align: justify;"><span style="outline: none; color: #0066cc;"><<Regresar al artículo principal</span></a><span style="font-weight: bold; font-size: 8pt;"><br /> <br /> Por: Diego Zorrilla, Representante Residente del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Ecuador.<br /> <br /> </span><br /> Desde las Naciones Unidas, hemos constatado que fijarse objetivos sí funciona. Hemos visto con satisfacción la capacidad del mundo para lograr la mayor parte de las metas planteadas en los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), que marcaron el rumbo del desarrollo global en el período 2000-2015. <br /> <br /> Así, millones de personas han mejorado sus vidas, gracias a la labor concertada por alcanzar los ODM, pilares sobre los que se asienta la nueva agenda de desarrollo. Se ha logrado reducir la pobreza extrema, incrementar el acceso a los recursos de agua potable, mejorar las vidas de los habitantes de barrios marginales y lograr el equilibrio de género en el acceso a la escuela primaria.<br /> <br /> <br /> Los nuevos 17 ODS buscan ir aún más lejos a la hora de enfocar los esfuerzos mundiales en la erradicación de la pobreza, el hambre y las principales enfermedades. Plantean nuevos retos con el establecimiento de metas en ámbitos como la desigualdad, el crecimiento económico, el empleo digno, la energía sostenible, el cambio climático, la paz y la justicia, entre otros. <br /> <br /> La agenda post 2015 otorga especial énfasis al rol de la empresa privada como una fuerza transformadora clave. Este año representa por tanto, para el sector privado, la oportunidad de empezar a alinear sus estrategias con los ODS, produciendo resultados que beneficien a la sociedad y a la economía global, al tiempo que aseguren un éxito empresarial sostenible. <br /> <br /> Durante los últimos 20 años, la probabilidad de que un niño o una niña muera antes de cumplir cinco años se ha reducido casi a la mitad. Lo mismo ha sucedido con la tasa de mortalidad materna a nivel global. Actualmente, más personas que nunca reciben terapias antirretrovirales contra el VIH.