Y, ¿eso cómo se logra? Con el acompañamiento, con una remuneración competitiva, con el interesarse auténticamente por las necesidades personales y profesionales del colaborador. Ademas, con el acercamiento a la familia de ese empleado para involucrarla en el papel tan fundamental del trabajo de un guardia de seguridad. Así se ha marcado el camino de Liderman que, hoy por hoy, es un caso de estudio empresarial porque ha logrado el compromiso y elevado el autoestima de los guardias de seguridad, especialmente en Perú y Ecuador.<br />