Un ejemplo es el caso de la empresa Mia Morris con 30 años en el mercado no trabaja por comisiones, no regatea precios, habla todo el tiempo con clientes en línea y no vende sus autos en una sala de concesionario.<br /> <br /> En lugar del proceso de venta tradicional, un concesionario de Nissan en Nueva York dice que su trabajo ahora es como el de un guía. Todo es visible para los clientes y se puede ayudar a que escojan el auto indicado.<br /> <br /> Sitios web como TrueCar.com y Edmunds.com han dejado a un lado a los vendedores que sacaban ventajas sobre el precio de un vehículo nuevo. Ahora los compradores llegan al concesionario con toda la información que han visto en el Internet, con el precio de la factura y la comparación de cotizaciones de otros concesionarios de autos.<br /> <br /> Esto ha ayudado a eliminar el pago de comisiones a los vendedores, fijar precios más cercanos a la realidad y destinar a varios empleados a trabajar por Internet.<br /> <br /> Fuente: Wall Street Journal<br /> <br /> <br />