Durante el mes se comercializaron 10.019 unidades, lo que representa un incremento del 17,2% frente al mismo mes del año anterior. Esta recuperación mensual ofrece señales de dinamismo en la industria, especialmente en un entorno económico que sigue enfrentando desafíos en consumo e inversión. Impulso liderado por los vehículos livianos El mayor impulso provino del segmento de vehículos livianos, que incluye automóviles, SUV, camionetas y vehículos de uso particular. En junio se vendieron 9.042 unidades de este tipo, lo que representa un crecimiento del 17,6% en relación con junio de 2024. Este crecimiento está asociado a varios factores, entre ellos: Ofertas y promociones más agresivas por parte de concesionarios. Condiciones más competitivas de financiamiento, con tasas más bajas en algunos bancos y cooperativas. Una mayor renovación del parque automotor, especialmente en ciudades principales. Estabilidad de precios en ciertos modelos debido a un entorno cambiario relativamente controlado. Los consumidores están optando por vehículos con mayor eficiencia en consumo y tecnología, lo que ha impulsado también la oferta de unidades híbridas y algunas versiones eléctricas. Segmento de pesados también registra crecimiento Por su parte, el segmento de vehículos pesados camiones, buses y maquinaria de carga también mostró una evolución positiva. En junio se vendieron 977 unidades, marcando un crecimiento del 13,9% respecto al mismo mes del año anterior. Este comportamiento está vinculado a una leve recuperación en sectores como la construcción, logística y agroindustria, que requieren renovación de flotas para operaciones en rutas nacionales y rurales. Si bien aún no se alcanzan los niveles prepandemia, se evidencia una tendencia ascendente moderada, especialmente en regiones como la Sierra centro y la Costa. Ventas acumuladas aún muestran cifras en rojo A pesar del buen desempeño mensual, el balance semestral todavía muestra una ligera contracción. Entre enero y junio de 2025, se han comercializado 55.342 vehículos nuevos, lo que representa un decrecimiento del 3,3% frente al mismo periodo de 2024. Este resultado se explica por: Un inicio de año más lento, influenciado por incertidumbre económica y ajustes fiscales. Restricciones en el acceso al crédito, especialmente durante el primer trimestre. Cambios en políticas de importación que afectaron la disponibilidad de algunos modelos. Perspectivas para el segundo semestre El comportamiento positivo de junio abre expectativas más optimistas para el segundo semestre de 2025. El sector automotor espera un repunte más marcado hacia el tercer trimestre, impulsado por la temporada alta de promociones, lanzamientos de nuevos modelos y una posible mejora en las condiciones macroeconómicas. Según fuentes del sector, si se mantiene esta tendencia, el año podría cerrar con cifras similares o ligeramente superiores a las de 2024, aunque la meta de superar los 120.000 vehículos vendidos aún dependerá del entorno económico y político del país.