<span style="font-weight: bold;">¿Por qué es importante para Ecuador pertenecer al Consejo Mundial de Energía?</span><br /> El Consejo Mundial de Energía (WEC) es la red de líderes del sector energético más importante del mundo, con participación de más de 3.000 organizaciones de 90 países. En su seno se discuten las estrategias mundiales, regionales y nacionales necesarias para mejorar el acceso universal a fuentes de energía económicas y sostenibles. Que el Ecuador se integre a este diálogo nos permitirá enriquecer y fortalecer nuestras capacidades en materia de diseño de políticas públicas en relación a la transformación de la matriz energética, objetivo claro del Gobierno de la Revolución Ciudadana.<br /> <br /> <span style="font-weight: bold;">¿Cuáles son las acciones y políticas púbicas que ha implementado el MEER y su relación con el “Trilema Energético”?</span><br /> La energía es el motor del desarrollo, habilitante del crecimiento económico y del bienestar social. Los objetivos que el Ministerio de Electricidad y Energía Renovable se han planteado para el desarrollo del sector eléctrico ecuatoriano se pueden resumir en: mejorar el acceso de la población al servicio eléctrico, a bajo costo e incrementando la participación de la energía renovable, aprovechando la disponibilidad de recursos renovables del país. Todos ellos se alinean con alguno de los ejes del trilema energético, que es el concepto central de la filosofía del WEC para buscar un desarrollo energético seguro, asequible y con respeto por el medio ambiente.<br /> <br /> El sector eléctrico ecuatoriano por décadas sufrió de abandono y desinversión. Esto generó una profunda crisis con impacto en la gestión técnica y financiera, poca inversión en la expansión del sistema y altos niveles de pérdidas de energía. Afrontando esta realidad, el actual Gobierno Nacional, desde el 2007 hasta la fecha, ha invertido en el sector eléctrico más de USD 8 mil millones, para mejorar el suministro de energía y la seguridad del abastecimiento.<br /> <br /> En estos últimos siete años hemos llevado la cobertura del servicio eléctrico a un nivel superior al 97%, gracias a la importante inversión del Estado en el crecimiento de la infraestructura de distribución de electricidad, principalmente en los sectores rurales y urbano-marginales.<br /> <br /> Por el lado de la generación, con una inversión que bordea los USD 6.000 MM, construimos de manera simultánea ocho grandes proyectos hidroeléctricos que incrementarán en 2.800 MW la capacidad hidroeléctrica existente que actualmente bordea los 2.200 MW, lo que se traducirá en que más del 90% de la energía eléctrica provenga de fuentes de energía renovable. Gracias a este cambio en la matriz energética hemos emprendido en uno de los programas más ambiciosos del Gobierno, el de sustituir tres millones de cocinas a gas por cocinas eléctricas de inducción, lo que evitará la importación de un millón de toneladas de GLP por año, y reducirá las emisiones de más de dos millones de toneladas de CO2. Esta iniciativa se refuerza con una adecuada política de subsidios, que permite a la población, menos favorecida, acceder a fuentes de energía a costos razonables reduciendo la pobreza energética. En estos años de intenso trabajo, se ha alcanzado una oferta de energía suficiente para el abastecimiento de la demanda, se han mejorado los indicadores de calidad y se ha reducido drásticamente los niveles de pérdidas de energía que superaban el 25%, llevándolos a niveles cercanos al 12%, habiendo incrementado adicionalmente la recaudación que llega al 99,6%, todo esto con un impacto positivo directo en la salud financiera del sector.<br /> <br /> El crecimiento en la capacidad de generación nos ha exigido reforzar el sistema de transmisión con nuevas redes y subestaciones, construyendo el primer sistema de transmisión de 500 mil voltios que enlazará los principales centros de generación y de consumo, y que posibilitará, a través de interconexiones con nuestros países vecinos, el funcionamiento de un gran corredor eléctrico en la región andina. De la misma manera, han sido repotenciados los sistemas de distribución. Mediante reformas profundas en el sector eléctrico, que se implementaron a partir del año 2008 y que se han consolidado a partir de la vigencia de un nuevo marco legal, la Ley Orgánica del Servicio Público de Energía Eléctrica aprobada en enero del 2015, y que define a la energía eléctrica como un servicio público estratégico, siendo de responsabilidad del Estado, el garantizar abastecimiento para toda la población, dando apertura además a la inversión privada en generación, particularmente de aquella que hace uso de las fuentes renovables no convencionales.<br /> <br /> Las acciones que se están llevando a cabo demuestran el serio compromiso de la República del Ecuador para garantizar, a nuestra población y las futuras generaciones, el acceso a una energía limpia, renovable, segura y amigable con el ambiente, utilizando los recursos que disponemos de forma inteligente y eficiente. Hemos avanzado, pero aún nos falta mucho camino por recorrer. La cooperación a nivel internacional, el intercambio de experiencias y de las mejores prácticas, la capacitación, la formación del talento humano, el apoyo técnico y la discusión permanente de un tema de tanta relevancia como es el derecho de la población a acceder a la energía, nos permitirán enfrentar con éxito este enorme reto que tenemos en nuestras manos.