La Organización Internacional del Trabajo (OIT) realiza un amplio análisis de la situación y características del empleo en el mundo. Dentro de sus preocupaciones se encuentran las altas tasas de desempleo juvenil y la alta incidencia del empleo informal en muchas economías emergentes o en vías de desarrollo. <br /> <br /> Si bien muchos países de Latinoamérica han logrado disminuir de forma importante sus tasas de desempleo a valores de un dígito, la incidencia de la informalidad sigue siendo un problema sin resolver. De hecho, la OIT menciona con preocupación que en muchos países latinoamericanos existen personas con empleo en condiciones de pobreza, lo que no debería ocurrir si el mercado laboral funciona sin distorsiones. <br /> <br /> El empleo informal se refiere a aquella actividad que si bien permite generar un ingreso, no mantiene las condiciones y prestaciones de un empleo formal como lo son: trabajar en un establecimiento o empresa legalmente constituida, pagar al menos el salario básico, respetar la jornada laboral legal y cubrir el seguro social. Si una de estas falta se considera al trabajo como informal. <br /> <br /> En el contexto latinoamericano solo seis economías mantienen tasas de informalidad menores al 50%. En este grupo destacan Uruguay, Costa Rica, Brasil y Chile con tasas inferiores al 40%. <br /> <br /> En contrapartida, los países con mayor proporción de empleo informal son Ecuador, Paraguay, Honduras, Guatemala, Nicaragua y Bolivia, con tasas de informalidad que superan el 65% del total. <br /> <br /> <img src="https://admin.grupo-ekos.com/storage/posts/migracion/empleo-informal-latinoamerica.png" align="left" style="margin: 0px 0px 0px 0px;" /> <br /> <br /> <img src="https://admin.grupo-ekos.com/storage/posts/migracion/RK5-s1-mar.png" align="left" style="margin: 0px 0px 0px 0px;" /> <br /> <br /> Fuente: Organización Internacional del Trabajo. <br /> <br /> Por Víctor Zabala Andrade, Ekos. <br /> <br />