McNerney, de 65 años, que ha alcanzado la edad de jubilación obligatoria de Boeing, continuará como Presidente de la Junta Directiva y empleado de la firma hasta que se jubile a finales de febrero de 2016.<br /> <br /> La sucesión se produce antes de lo que algunos esperaban. El año próximo, la compañía aeroespacial con sede en Chicago celebrará su centenario; algunos indicaron que pensaban que McNerney pediría permiso para permanecer más tiempo al frente de la compañía, de la que ha sido Presidente Ejecutivo desde 2005.<br /> <br /> Muilenburg, de 51 años, ha sido Director Operativo y Presidente desde 2013. Ha trabajado en Boeing durante tres décadas, incluyendo su labor como Presidente y Presidente Ejecutivo de la unidad de Defensa, Espacio y Seguridad y Presidente de la división de Servicios y Soporte Globales.<br /> <br /> “Dennis es un líder extremadamente capaz, experimentado y respetado, con una inmensa pasión por nuestra empresa, nuestra gente y nuestros productos y servicios”, dijo McNerney.<br /> <br /> A principios de junio, Boeing dijo que el crecimiento a corto plazo del tráfico aéreo mantendrá la producción de aviones en niveles récord y más que duplicará la flota global durante las próximas dos décadas. Sin embargo, la empresa luego recortó ligeramente su pronóstico de crecimiento económico global y transporte aéreo en el largo plazo respecto del año pasado para reflejar la reciente debilidad en las economías emergentes. Boeing señaló que la flota comercial mundial crecerá de 21.600 aviones en 2015 a casi 43.600 aviones en 2034.<br /> <br /> <br /> <span style="color: #222222; font-size: 8pt; font-style: italic;">Artículo originalmente publicado por: The Wall Street Journal </span><br />